Clase gratis de Yoga Facial
¡Nuevo Curso de Yoga Facial de 30 días!
Te presento un nuevo curso que tenemos dentro de la Sala de Práctica.
El curso está diseñado para que hagas un vídeo al día, de 15 minutos, durante 30 días.
Para que lo puedas integrar en tu rutina de mañana, medio día o noche.
Es un curso de Yoga Facial sencillo, directo, divertido y muy efectivo.
Cada vídeo te propone un serio trabajo para tonificar, fortalecer y revitalizar los músculos faciales.
Durante un mes completo de práctica, nuestra profesora y experta en Yoga Facial María Sánchez te guía por un profundo trabajo de cara, cuello, cabeza y boca.
Puedes apuntarte desde aquí y además tendrás acceso a todo el material de la plataforma.
En la introducción María te dará las sencillas claves para seguir el curso y, como complemento, 2 master clases añadidas para profundizar, si lo deseas, más aún en el Yoga Facial.
La idea es llevarnos la práctica de Yoga con su plena consciencia y el derivado de l salud también al rostro.
Y además te lo pasas genial mientras haces infinidad de cosas que no estás acostumbrado a hacer.
Es una sensación maravillosa.
El Yoga Facial es mucho más que una serie de movimientos; es una práctica que combina ejercicios específicos de estiramiento y movilidad, con técnicas de respiración y relajación. Esto canaliza la salud y el brillo de la piel desde adentro hacia afuera.
Al igual que el Yoga normal, se trabaja en el cuerpo físico, emocional y espiritual.
El yoga facial se centra en la cara como un reflejo de nuestro bienestar general.
Durante este desafío de 30 días, exploraremos con María una amplia variedad de técnicas de Yoga Facial: desde masajes suaves hasta ejercicios de estiramiento, movilización y tonificación.
A medida que avancemos, notarás cambios en tu piel y en tu apariencia en general.
Además, más allá de la mejora estética, el Yoga Facial también nos aporta una serie de beneficios que me gustaría destacar.
La premisa fundamental del Yoga Facial reside en el entendimiento de la anatomía y la fisiología de los músculos faciales. Tanto la musculatura y fascia más superficial como la más profunda.
Al igual que cualquier otro grupo muscular en el cuerpo, ejercitar y trabajar los músculos de la cara y cuello pueden beneficiarse enormemente de un ‘entrenamiento’ específico, concreto y dirigido.
Este enfoque se basa en la capacidad del cuerpo para mejorar y fortalecerse en respuesta a estímulos adecuados, conocido como principio de adaptación neuromuscular y fascial.
Veamos 5 puntos en los que vamos a profundizaren este desafío.
Beneficios clave del Yoga Facial
Tono muscular de rostro y cuello: desde el primer día notas un trabajo intenso de cuello y cara.
A través de una serie de ejercicios de resistencia, combinación inteligente de movimientos y estiramientos focalizados, el Yoga Facial tonifica nuestros músculos de la cara y cuello, contrarrestando la pérdida de tono asociada con el envejecimiento y la falta de ejercicio. Sí, incluso aunque practiquemos Yoga, porque es totalmente dirigido a la zona de la cabeza.
Circulación Sanguínea: los ejercicios mencionados, y la práctica regular de Yoga Facial promueve una mejor circulación sanguínea en la cara, lo que aumenta el suministro de oxígeno y nutrientes a las células de la piel, mejorando así su salud y vitalidad.
En osteopatía hay una máxima que reza: la ley de la arteria es absoluta (dónde llega la sangre, hay vida).
Con lo que una mejor circulación también puede reducir la hinchazón y mejorar el tono de la piel.
Tensión muscular y estrés: las acciones que realizamos en el curso son activos, pero también pasivos y enfocados a llevar pasividad y relajación a la musculatura profunda del rostro y la cabeza.
Musculatura más superficial como los maseteros y temporales, pero también la musculatura profunda de boca y garganta se benefician de esta pasividad activa y se alivian muchas tensiones acumuladas en estas zonas y que, en muchas ocasiones, provocan gestos duros por tensión crónica y líneas de expresión en nuestra cara.
Producción de colágeno: algunos ejercicios de Yoga Facial están diseñados para estimular la producción de colágeno, una proteína esencial para mantener la elasticidad y la firmeza de la piel, lo que resulta en una mejor apariencia. A medida que practiques regularmente, notarás una mejora en la textura y la calidad de tu piel.
Bienestar emocional y autoestima: la conexión mente-cuerpo inherente al Yoga también está presente aquí y, no solo contribuye a mejorar la apariencia externa, sino que también fomenta un sentido de bienestar emocional, calma que puede ser algo muy positivo al finalizar nuestro día.
30 días para cambiar y mejorar nuestro rostro y nuestra energía.
¡Espero que disfrutes de esta clase!
Si quieres continuar con el curso puedes apuntarte desde aquí donde además tendrás acceso a todo el material de la plataforma.